top of page

DAFNE ARTIGOT

He crecido con dos canales de televisión. En uno había fútbol o toros y el UHF funcionaba cuando quería, ¡Menudo subidón cuando Los picapiedra te animaban la tarde!

​

La España de mi infancia era un lugar feo y marrón, Cuando asomaba Walt Disney y nos contaba lo maravilloso que era Disneylandia mi cerebro se evadía a mundos fabulosos llenos de éxtasis de colorines....

 

A medida que fui creciendo y el país se transformaba, el punk me entusiasmó y Rockola se convirtió en mi segundo hogar. Estudié publicidad, ha sido una buena escuela para ganarme la vida y cumplir con plazos de tiempo imposibles, Trabaje en un par de agencias y más adelante como Freelance haciendo diseños e ilustraciones. Me contrataron en IKEA cuando se implanto en España como responsable de comunicación, Y eso me llevo al mundo de la decoración y el visual merchandising, un día me hicieron una oferta del grupo Hachette Filipacchi y empece a trabajar como estilista e ilustradora para varias publicaciones como QUO, casa 10, ELLE, Elle Deco,

​

También trabajo para Leroy Merlin como formadora, les doy cursos a los empleados sobre color, composición, estilos, materiales...etc.

​

Hace seis años las formaciones de Leroy se suspendieron debido a la crisis, y aunque ya había hecho anteriormente alguna incursión en el arte nunca tenía tiempo de terminar mis proyectos debidamente. Así que me forme en Esdip y más adelante con Bárbara Almart y aprendí técnicas de escultura, trabaje mi estilo y empece a exponer en colectivas y participar en acciones artísticas.

​

El mundo que ven mis ojos siempre es más fantasioso que el real y tengo un sentido del humor bastante ácido. La crítica social está presente en casi toda mi obra. Â¡Al fin y al cabo me he pasado la vida vendiendo cosas que aborrezco!

​

Me gustan los gordos, la comida basura, los dulces, lo pringoso, los dibujos animados, la serie B, la gente diferente, lo hortera, lo excesivo, el mal gusto, lo dorado, las películas fantásticas, los animales rechonchos, Jue Minjun y sus chinos descojonaos, los rulos, las máscaras de lucha libre, los Donuts de colores, los corazones, los alienígenas, los caramelos, las barbacoas ,Benidorm, los cuentos de hadas, los superhéroes y cualquier cosa que potencie las endorfinas (menos la tele basura).

​

Me dedico al arte por la diversión que supone inventar mundos mejores que el real, y además no me puedo resistir a una caja de lápices de colores.

Foto: Ismael DeLarge

bottom of page